Muchos préstamos hipotecarios incluyen un seguro de vida… aunque el cliente nunca lo pidió.

Es habitual que al firmar una hipoteca el banco imponga condiciones que parecen innegociables. Entre ellas, suscribir un seguro de vida como requisito para conceder el préstamo. A veces incluso eligen ellos la aseguradora. Y lo más grave: el coste total del seguro se paga de una vez, con una prima única que se añade al importe del préstamo.

Si no tuviste libertad para elegir contratar ese seguro, ni con quién hacerlo, podrías estar ante una cláusula abusiva. Y eso significa que puedes reclamar.

Revisamos las condiciones de tu hipoteca, incluso si ya está cancelada. Si se confirma que el seguro fue impuesto, gestionamos la devolución de las cantidades que pagaste sin haberlas disfrutado. Porque las garantías deben protegerte, no imponerse sin transparencia.

El Tribunal Supremo ha sido claro: vincular la concesión de una hipoteca a la contratación obligatoria de productos adicionales es abusivo cuando no existe una verdadera libertad de elección. Si tu banco te obligó a contratar un seguro específico, tienes derecho a recuperar lo que pagaste.

No importa cuánto tiempo haya pasado. Si tu seguro fue impuesto, podemos ayudarte a reclamar con respaldo legal y estrategia clara.